La diputada de IU y candidata a presidenta del Gobierno riojano por Podemos-Izquierda Unida, ha participado en Tenerife en varios actos, en los que ha explicado la importancia de la pionera ley de la que es artífice en su región para garantizar la atención y los derechos de pacientes con trastornos mentales y de sus familias cuidadoras
La vicepresidenta primera del Parlamento de La Rioja, Henar Moreno Martínez, impulsora en esa región de la primera Ley autonómica de Salud Mental, y candidata de Podemos-Izquierda Unida a la presidencia del Gobierno riojano, anima a la izquierda en Canarias a promover en el Parlamento canario en la próxima legislatura una iniciativa legislativa similar para abordar la que ha sido siempre una de las principales asignaturas pendientes de la sanidad pública en España.
Henar -que es abogada y diputada regional de IU en este mandato- ha participado en unas jornadas celebradas sobre este tema en el Parlamento de Canarias y un acto organizado por Unidas se puede en La Laguna.
Como artífice de la Ley de Salud Mental en La Rioja, donde gobierna el PSOE en pacto con IU y Podemos, cree que Canarias debe seguir esa senda abierta en su comunidad «gracias a que IU ha sido decisiva en esta legislatura en el Parlamento» regional.
Esa ley contempla no solo los tratamientos de salud mental sino también los factores sociales, es decir, remover las dificultades que tienen las personas con trastornos mentales en el acceso al empleo o la vivienda, para que puedan disponer de un hogar independiente, “acompañadas pero no tuteladas”.
Moreno incide en que la nueva ley riojana aborda la situación de las personas mayores pero también de la población infanto-juvenil, incluyendo la prevención del suicidio.
La nueva normativa, subraya la diputada y candidata de La Rioja, también contempla los problemas sociales que estos pacientes generan en sus cuidadores (padres y madres) cuando estos envejecen y ya no pueden asumir esa tarea.
Todo ello, sostiene, debe tenerse en cuenta en una futura ley canaria en esta materia, que “debe regular qué objetivos primordiales rigen ese tratamiento integral, también contemplar los problemas sociales que las personas con problemas de salud mental generan a sus padres y madres cuando envejecen y no pueden asumir los cuidados que han venido asumiendo, lo que también les genera situaciones de vulnerabilidad.”
«De ahí que nuestra ley autonómica», expone Moreno, recoja también el derecho de los familiares a la desconexión de esos cuidados, pues no tienen por qué asumir una responsabilidad que debe ser del Estado, más allá de dar el cariño y amor que, evidentemente, quieren dar a sus seres queridos».
Otro aspecto de la nueva legislación riojana gira en torno a la participación de las personas con trastornos o con problemas de salud mental y sus familiares en la definición de las políticas, de las estrategias públicas.
La vicepresidenta del Parlamento de La Rioja también destaca que en su región a los pacientes de salud mental solo se les puede internar de manera voluntaria en situaciones «claramente excepcionales y sólo con tutela judicial».
Igualmente, puntualiza, ha quedado muy restringido el uso de la contención mecánica de estos pacientes psiquiátricos, «ya que todos los estudios dicen no es otra cosa que una forma de tortura y que debe ser erradicada de nuestro sistema de salud».
Preguntada sobre cuál es su recomendación para dar el paso hacia una Ley de Salud Mental, Moreno pone de relieve que «lo primero que desde las instituciones públicas tenemos que hacer siempre es escuchar a la sociedad, porque son los movimientos sociales los que normalmente nos marcan el camino y la estrategia en todo momento», y luego está la voluntad y el poder político que se tenga, ya que en La Rioja, el voto de IU «era determinante para aprobar cualquier ley».
Y en ese sentido, enfatiza que su partido «mostró firmeza al PSOE para sacar adelante esta ley, con las tensiones propias de intentar atraer al Partido Socialista hacia la izquierda, pues, como todos sabemos, los socialistas son muy de izquierdas en campaña electoral y mucho menos cuando gobierna».