Mientras el presidente canario se llena la boca afirmando que Vox “no es bueno”
para Canarias, su partido sigue entregándole poder a la ultraderecha en
ayuntamientos como Granadilla o Arona.

Izquierda Unida Canaria (IUC) denuncia la absoluta falta de coherencia de Fernando
Clavijo y Coalición Canaria, que mientras en público critican a Vox, en privado le
abren las puertas de las instituciones canarias, pactando con la extrema derecha en
diferentes municipios del archipiélago. Es un ejercicio de cinismo político que deja
claro que para CC no existen principios ni líneas rojas cuando se trata de
mantenerse en el poder.
“Clavijo dice que Vox no es bueno para Canarias, pero su partido no tiene problema
en ponerle la alfombra roja en ayuntamientos como Granadilla, Arona o Teguise. No
hay discurso contra la ultraderecha que valga cuando se está entregando el
gobierno municipal a la extrema derecha en distintos puntos del archipiélago”, ha
declarado Luisa Tamayo, Coordinadora Nacional de IUC.
En los últimos días, Clavijo ha asegurado que Vox “no es bueno” para Canarias por
su uso partidista y racista de la migración, especialmente de la infancia no
acompañada. Sin embargo, sus palabras no tienen ningún valor cuando su partido
sigue pactando con la extrema derecha en las instituciones locales.
El último ejemplo es la moción de censura en Granadilla de Abona, donde Coalición
Canaria, el PP y Vox se han unido para desalojar a la alcaldesa socialista. Este
acuerdo no es nuevo: ya en la toma de posesión en 2023, los concejales de Vox
apoyaron a CC para intentar formar gobierno. Ahora, con la firma oficial del pacto,
se ha consolidado lo que CC lleva meses negociando en la sombra.
Lo más grave es que la rúbrica de este acuerdo se ha producido en la sede de
Presidencia del Gobierno de Canarias, donde trabaja el nuevo alcalde de Granadilla,
José Domingo Regalado (CC). Esto deja claro que la implicación de Coalición
Canaria en estos pactos con Vox no es algo local ni aislado, sino que cuenta con la
aprobación de la cúpula del partido y de Clavijo en persona.
C/Pérez del Toro, 7 – Las Palmas de Gran Canaria | comunicacion@iucanarias.org
| Nota de prensa
No es la primera vez que Coalición Canaria rompe sus supuestas “líneas rojas” ante
Vox. En Arona, la ultraderecha ya forma parte del grupo de gobierno con CC y el PP.
En Teguise, Vox también apoyó a CC, aunque luego el concejal de extrema derecha
abandonó el partido. Y en Güímar, los nacionalistas llevan meses negociando con el
PP para arrebatar al actual gobierno en el que se encuentra IUC, con la
ultraderecha también en la ecuación.
“Coalición Canaria ha demostrado que su única línea roja es mantenerse en el
poder a toda costa. Da igual lo que Clavijo diga en público, la realidad es que en
privado están negociando y pactando con la extrema derecha, dándole acceso a
instituciones en Canarias”, ha añadido Tamayo.
Es especialmente grave que Coalición Canaria, que se autodenomina un partido
“nacionalista”, esté aliándose con un partido como Vox, que es abiertamente
centralista y contrario al autogobierno canario. Vox no solo niega el REF, sino que
ataca la propia existencia de las autonomías, defiende la recentralización del Estado
y desprecia las instituciones canarias.
Es un insulto que Coalición Canaria entregue municipios canarios a un partido que
desprecia el autogobierno. Es la prueba definitiva de que para CC, su
“nacionalismo” no es más que un disfraz que se quitan cuando necesitan los votos
de la ultraderecha para gobernar y probablemente los usen si en 2027 necesitan
también esos votos para mantener la presidencia del gobierno autonómico.
Desde IUC denunciamos este engaño a la ciudadanía canaria. Clavijo y Coalición
Canaria no pueden seguir vendiendo la falsa idea de que están en contra de Vox
mientras en los despachos pactan con ellos sin ningún escrúpulo.
Si Clavijo de verdad cree que Vox no es bueno para Canarias, que rompa de
inmediato todos los acuerdos con la ultraderecha en municipios del archipiélago. De
lo contrario, que deje de mentir y reconozca que su partido ha elegido el camino de
la extrema derecha para mantenerse en el poder.