Frente al fortalecimiento de las universidades públicas canarias, el Gobierno de CC y PP opta por expandir la educación privada, comprometiendo el acceso igualitario a la educación superior.
Izquierda Unida Canaria (IUC) expresa su firme rechazo a la reciente aprobación por parte del Parlamento Canario de una nueva ley que reconoce y facilita la implantación de otra universidad privada en el archipiélago. Esta decisión, lejos de contribuir al desarrollo educativo de Canarias, representa un paso más hacia la liberalización del mercado educativo, poniendo en riesgo el principio de igualdad de acceso a la educación superior.
Luisa Tamayo, Coordinadora Nacional de IUC, critica duramente esta orientación del Gobierno de Canarias, conformado por Coalición Canaria y el Partido Popular, que parece priorizar los intereses empresariales sobre el derecho a una educación pública, gratuita y de calidad. «En un momento en el que nuestras universidades públicas, la Universidad de La Laguna (ULL), la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria (ULPGC) y la Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED), necesitan más apoyo que nunca, resulta incomprensible que el foco se desvíe hacia la creación de instituciones privadas que solo servirán para segmentar aún más el acceso a la educación superior», afirma Tamayo.
La aprobación de esta ley no sólo plantea interrogantes sobre la equidad en el acceso a la educación universitaria, sino que también sugiere un modelo educativo donde la calidad esté determinada por la capacidad económica del estudiantado y sus familias. «Estamos asistiendo a la construcción de un sistema educativo de dos velocidades, donde solo la élite económica podrá permitirse una educación de primer nivel, mientras que la mayoría de la población canaria tendrá que conformarse con opciones menos favorecidas», denuncia la Coordinadora Nacional de IUC.
Desde Izquierda Unida Canaria se aboga por una inversión decidida en las universidades públicas del archipiélago, que son pilares fundamentales en la formación de futuros profesionales y en la investigación que impulsa el desarrollo social y económico de Canarias. «Es esencial que el Gobierno de Canarias revierta esta tendencia y se centre en fortalecer nuestras instituciones educativas públicas, garantizando que todos los jóvenes canarios tengan las mismas oportunidades de acceder a una educación universitaria de calidad, independientemente de su origen socioeconómico», insiste Tamayo.
IUC se compromete a seguir luchando por un sistema educativo que promueva la igualdad, la calidad y la accesibilidad, y que considere la educación como un derecho fundamental y no como un producto de mercado. «La educación es un derecho, no un privilegio, y desde Izquierda Unida Canaria trabajaremos incansablemente para asegurar que este principio se mantenga en el corazón de nuestras políticas educativas», concluye Luisa Tamayo.
La formación política hace un llamado a la ciudadanía y a la comunidad educativa a unirse en la defensa de un sistema educativo público que sea inclusivo, equitativo y orientado al bienestar común, y no a los intereses de unos pocos. Izquierda Unida Canaria se posiciona como un firme defensor de la educación pública y reitera su compromiso con la lucha por un futuro en el que todos los canarios y canarias puedan acceder a una educación superior de calidad sin barreras económicas.