La organización respalda las manifestaciones convocadas en todo el Estado y alerta de la situación límite que atraviesan las islas: “Canarias no puede ser el paraíso del
turismo y el infierno del alquiler”


Izquierda Unida Canaria (IUC) ha mostrado su apoyo a las manifestaciones convocadas este sábado 5 de abril bajo el lema “Contra la especulación, defendamos el derecho a la vivienda”, sumándose al llamamiento para llenar las plazas y calles del archipiélago en defensa de un derecho fundamental cada vez
más vulnerado. Las concentraciones se celebrarán en San Isidro (Tenerife), la Plaza
del Pilar (Gran Canaria), la Plaza de la Iglesia de Puerto del Rosario (Fuerteventura) y la calle Real de Arrecife (Lanzarote), todas a las 12:00 horas.
Desde IUC se advierte de que Canarias vive una auténtica emergencia habitacional sin precedentes. Con el alquiler disparado un 22,04% en el último año, el archipiélago se ha situado como la segunda región del Estado con mayor encarecimiento. En Santa Cruz de Tenerife, los precios se han incrementado más de un 29%, y el área metropolitana es ya la segunda zona de España donde más ha
subido el precio de la vivienda. A esto se suma que el 19% del parque de viviendas está vacío, mientras miles de personas no pueden acceder a una vivienda digna.
“La ciudadanía canaria está siendo expulsada de sus barrios, víctimas de la turistificación, la especulación inmobiliaria y la pasividad institucional. Lo que tenemos no es un mercado de vivienda, sino un negocio voraz que nos deja sin presente y sin futuro”, ha denunciado Luisa Tamayo, Coordinadora Nacional de IUC.
“Desde IUC animamos a toda la ciudadanía a sumarse a estas movilizaciones. No hay cambio posible sin presión popular”.
Las organizaciones convocantes exigen medidas claras y valientes: bajada de
alquileres, recuperación de viviendas vacías y turísticas para uso habitacional, regulación del alquiler por habitaciones y de temporada, paralización inmediata de los desahucios y ampliación del parque público de vivienda. “Lo que está en juego no es solo el precio del metro cuadrado, es el modelo de islas, de ciudad y de vida que queremos”, remarca Tamayo.
La formación también ha mostrado su preocupación por la falta de voluntad política
del Gobierno de Canarias para declarar zonas tensionadas que permitan aplicar límites al alquiler. “Mientras otras comunidades, incluso gobernadas por el Partido Popular como Baleares, suben la ecotasa y regulan el alquiler vacacional, aquí tenemos un Gobierno de CC y PP que sigue priorizando el interés de los fondos buitre y las plataformas turísticas sobre las necesidades básicas de su gente”, ha
criticado la Coordinadora.
En Las Palmas de Gran Canaria, a pesar de ser la novena ciudad más poblada del país y con datos de emergencia habitacional, aún no se ha confirmado su declaración como zona tensionada. “Es inadmisible que se siga retrasando una medida que permitiría poner límites al mercado y frenar la especulación. Cada día que pasa sin actuar es un día más en el que cientos de familias ven cómo se les
niega el derecho a quedarse en su propio hogar”.
Desde Izquierda Unida Canaria también se ha hecho hincapié en la situación de la juventud, que debe destinar hasta el 94% de su salario para poder emanciparse, según el Consejo de la Juventud de España. “Es imposible construir un proyecto de vida si todo tu sueldo se va en pagar un techo. Necesitamos políticas públicas que garanticen el derecho a la vivienda, no más liberalización ni más favores al capital inmobiliario”.
Finalmente, Tamayo ha insistido: “El 5 de abril no es solo una fecha en el calendario,
es una oportunidad para levantar la voz y decir basta. Quienes viven aquí, trabajan aquí, cuidan aquí, merecen vivir con dignidad. Canarias no puede seguir siendo una reserva de sol para los ricos mientras su gente vive en la sombra de la exclusión residencial”.
IUC invita a toda la ciudadanía a sumarse masivamente a las concentraciones convocadas en las islas y a seguir construyendo un movimiento fuerte, amplio y
combativo que sitúe el derecho a la vivienda en el centro de la agenda política y social.